FOTODEPILACION

 

La fotodepilación es la eliminación del vello a través de equipos de energía lumínica. Hay dos tipos: láser y luz pulsada o IPL.

La diferencia entre ambas es la longitud de onda a la que se trabaja. Con láser la depilación se hace con la misma longitud de onda, mientras que con luz pulsada esta longitud es variable.
Con la fotodepilación se consigue una depilación duradera o prolongada, pero nunca definitiva. No existe una depilación para siempre. El cuerpo está lleno de folículos inactivos que se van activando a lo largo de la vida. Por ello es imprescindible realizar sesiones de recordatorio una vez terminado el tratamiento.

Antes de someterte a una fotodepilación debes rellenar un cuestionario para ver si eres compatible con el tratamiento. Es imprescindible decir siempre la verdad sobre posibles fármacos que estés tomando. Ya que muchos de estos fármacos son fotosensibles.
Existen varias contraindicaciones. No puedes someterte a ella si estás embarazada o estás en un periodo de lactancia. Tampoco se pueden depilar las zonas donde hay un tatuaje. Tampoco se puede hacer sobre zonas con vitíligo, psoriasis o queloides.

Antes de empezar con el tratamiento la piel de la zona tendrá que estar muy hidratada para ello unos días antes comenzaremos a tratarla con una crema especifica para conseguir esta buena hidratación y conseguir que la piel sufra lo menos posible en el tratamiento.

La máquina que se usa para realizar la fotodepilación es un aparato de energía lumínica. De él se desprende una luz. En contacto con la melanina, esta luz se transforma en calor y llega directamente al interior del folículo dañando las células que alimentan el vello. En 15 días después de la sesión, el vello se cae y se desprende.

Entre sesión y sesión debe pasar, aproximadamente, un mes y medio.

 

  Nuestros precios son 25€ por cada zona y sesión que te quieras realizar, nuestros precios son unisex.